TARARIQUETECRIS

No olvides agitar tu varita que hay un mundo que crear

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No olvides agitar tu varita que hay un mundo que crear

Hoy es el día del maestro (entre los que me incluyo) y me gustaría dar las GRACIAS y mandar un abrazo a todos mis colegas de profesión que se esfuerzan día a día por crear una diferencia.

día del maestro

Por hacerlo bien pese a todas las dificultades del sistema, los recortes y las leyes educativas absurdas.

Por dejarse la piel al intentar comprender a cada alumno a pesar de tener demasiados en clase.

Por intentar enseñar desde el corazón y hacer actividades creativas a pesar de los axfisiantes temarios.

Por iluminar caminos de niños y adolescentes y ayudar a las familias.

A todos los que creen que con la educación se puede cambiar el mundo y se esfuerzan a diario por conseguirlo.

A todos y cada uno de ellos

¡¡¡ Gracias !!!

 

Y a los que han sucumbido y sienten que ya no se puede hacer nada…
uno más grande todavía para que recuperen la energía y el propósito de por qué se metieron en este mundo de la educación 😉
porque se necesitan muchas manos y los docentes hacen una gran labor con los niños que conformarán la sociedad del mañana.

Aquí va un cuento del gran Gianni Rodari que creo que ilustra el espíritu del buen docente 😉

” El sol viajaba por el cielo, alegre y glorioso, en su carro de fuego, despidiendo sus rayos en todas direcciones, con gran rabia de una nube de tempestuoso humor, que murmuraba:

  • Despilfarrador, manirroto; derrocha, derrocha tus rayos, ya verás lo que te queda.

En las viñas, cada racimo de uva que maduraba en los sarmientos robaba un rayo por minuto, incluso dos; y no había brizna de hierba, araña, flor o gota de agua que no tomase su parte.

  • Deja, deja que todos te roben: verás de qué manera te lo agradecerán cuando ya no te quede nada que puedan robarte.

El sol proseguía alegremente su viaje, regalando rayos a millones, a billones, sin contarlos.

Sólo en su ocaso contó los rayos que le quedaban y, mira por dónde, no le faltaba siquiera uno. La nube, sorprendida, se deshizo en granizo.

El sol se zambulló alegremente en el mar”

Cuentos por teléfono

(Gianni Rodari)

¿Cómo era tu maestro favorito? Seguro que has tenido alguno que te ha hecho sentir especialmente bien. Si te apetece cuéntanoslo en un comentario y si me quieres enviar un correo electrónico para realizar cualquier consulta puedes hacerlo aquí.

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